miércoles, 17 de agosto de 2022

[Lugar de intrerés] "conjunto monumental" y Celebración de agosto 2022

En motivo de la celebración de “Lughnasadh” organizamos ciertas actividades de carácter familiar y cultural. Para iniciar el día alimentamos nuestro cuerpo, preparando alimentos que nos nutrieran y dieran fuerzas, luego nutrimos nuestro espíritu, dando paso a la ceremonia en la cual se hicieron ofrendas y libaciones, como de costumbre fue algo sencillo, cercano, emotivo y real.

unas de las ofrendas entregadas

Terminada esa primera parte, determinamos desplazarnos hasta “Olérdola” situado en el Alt penedès (Cataluña), donde encontraríamos un “conjunt monumental” (conjunto monumental) en la cima de un turón. Antes de bajar del vehículo sorprendía el lugar, unas altas murallas de época romana dan la bienvenida a los visitantes, murallas que según cuentan tienen una extensión de 145 metros de largo con cuatro torres en buen estado de conservación.

Torre, muralla y entrada.

Dentro de esas murallas se conserva mucha historia, parece ser que durante siglos este asentamiento fue usado dejando en él las huellas de diferentes épocas: ibérica, romana y medieval. Muy cerca de la muralla está la parte ibérica, pequeña, pero interesante, pues según la información que nos ofrecieron, es el único sitio de todos los asentamientos iberos encontrados donde hay una “tintorera”.

"Parte de zona Ibérica"

Pudimos ver a unos metros una impresionante “cisterna romana” que por lo que parece está tallada en la “roca viva” con unas escaleras que van hacia el fondo de esta. Impresiona pensar en la labor de construir algo así de grande y en ese terreno.
Subiendo una pendiente nos topamos con una iglesia la cual está “restaurada” (o en restauración, no quedó claro) que salvo la estructura y una estatua de lo que parecía el Arcángel San Miguel (creo, pero no puedo asegurar), no hay nada más, ni simbología, iconografía, ni pinturas... pero eso si, rodeada de una pequeña necrópolis de tumbas antropomorfas.

Saliendo de la iglesia y cuesta arriba, en la cima, están los restos de una atalaya y unas vista panorámicas de un extenso territorio, un clásico lugar estratégico, para controlar la zona. Después de esto solo quedó descender y ofreciéndonos de bajada otra perspectiva de lo que vimos.
En definitiva, es un lugar agradable de visitar y con “potencial”, mucha historia a la vista y reconocible, quizás el único punto flojo fue el museo, que es una diminuta sala con pocas piezas (aunque algunas de ellas muy interesantes).

Una de las muchas tumbas que vimos

El trato recibido por parte de los empleados fue muy educado y atento, además nos indicaron que afuera de las murallas se podía encontrar los restos de la iglesia de Santa María y una extensa necrópolis. Donde resultó ser un sitio muy tranquilo y acogedor, allí aprovechamos para descansar. Ya cayendo la noche decidimos volver a nuestros hogares y terminar el día.

Para los que estéis interesados:

http://www.olerdola.cat/turisme/la-petjada-de-la-historia/conjunt-monumental-dolerdola